viernes, 15 de febrero de 2008

El carnaval del PSOE

Acabamos de pasar los carnavales. El carnaval es un juego festivo en el que la gente se libera y su personalidad se convierte en máscara. No deja de tener gracia el hecho de que en su origen griego “persona” significa literalmente “máscara”, quizá porque en la vida cotidiana disimulemos nuestra auténtica personalidad.
Hay quien dice que el carnaval es no sólo saludable sino necesario para el equilibrio psíquico, pero que se convierte en un problema patológico cuando pasa a ser una práctica habitual. Esta es una de las patologías del PSOE: que está en un continuo carnaval y no se quita la careta ni para dormir. Su histrionismo carnavalesco hay que reconocer que le ha venido dando buenos resultados, a pesar de que lo que hace tras la máscara es engañar al personal dando como verdades las mentiras más burdas.
Nos cabe al Partido Popular la desagradable tarea de ir desenmascarando tanto engaño. Por limitarme ahora a algunas de las múltiples cuestiones en las que el PSOE viene actuando sistemáticamente con la cara tapada, es decir, con careta, para engañar día tras día al electorado castellanomanchego (para las comparsas socialistas el pueblo castellanomanchego es un mero electorado al que encandilar), me atrevo a plantear una serie de preguntas que, como puede comprenderse, para el buen entendedor, llevan implícitas las respuestas.
Dirán, como es costumbre, que crispamos la situación cuando, en realidad, lo único que hacemos es desenmascarar, a veces heroicamente, las verdades que sistemáticamente oculta o desfigura el PSOE. ¿Es eso crispar?
Vayamos a los hechos, es decir, a las preguntas.
¿Quién, que no crea estar escondido tras una careta, puede decir hoy me subo el sueldo un 75 % y luego, cuando se ve acorralado por la opinión pública, decir que, como no le hace falta el dinero, se lo va a donar a una organización benéfica?
¿Quién, que no crea estar escondido tras una careta, puede decir que el trasvase del Tajo alto finalizará el año 2015 cuando se está proyectando hacer otro desde el Tajo medio al Levante?
¿Quién, que no crea estar escondido tras una careta, puede decir que reduciendo a la mitad la superficie cultivada en regadío en el Alto Guadiana no se va a provocar ninguna crisis económica en la zona?
¿Quién, que no crea estar escondido tras una careta, puede decir que la economía de Castilla-La Mancha va viento en popa, cuando todos sabemos los apuros que están pasando muchas familias para llegar a fin de mes?
¿Quién, que no crea estar escondido tras una careta, puede decir que la pérdida de empleo es coyuntural y que no hay que tomar medidas para afrontar el futuro, cuando durante el mes de enero tenemos 6.200 nuevas personas desempleadas en Castilla-La Mancha?
¿Quién, que no crea estar escondido tras una careta, puede decir que la reforma del Reglamento Electoral tiene que ser aprobado por los dos terceras partes de la Cámara y, viendo que no le conviene, agiliza los trámites para aprobarlo por mayoría simple?
¿Quién, que no crea estar escondido tras una careta, puede decir que el Defensor del Pueblo puede ser un socialista, alcalde de Cuenca durante tres legislaturas, cuando la Ley obliga a que sólo puede desempeñar un cargo de tanta responsabilidad una persona con independencia política?
¿Están o no están en perpetuo carnaval?
Está claro, más claro que el agua, que si el PSOE se hubiera presentado a un concurso de comparsas, se habría llevado, sin lugar a dudas, el primer premio. Son auténticos artistas.

martes, 12 de febrero de 2008

Lo que nos faltaba

Despedimos el 2007 con la aprobación de la OCM de la vid y el vino y lo que nos faltaba era empezar el año con la aprobación del Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG).

El signo más claro de que la negociación de la OCM no ha salido bien es ver cómo brindaban nuestros negociadores.

El signo evidente de lo desfavorable que va a ser el PEAG es ver lo eufórico que está Barreda.

Lo de la OCM debe haber sido a consecuencia de que la ministra Espinosa no ha salido de su despacho para ver la realidad del viñedo y, sin conocer nuestra viticultura, es muy difícil defender los intereses españoles.

Lo del PEAG debe haber sido la moneda con la que Barreda apoya a Zapatero para que mantenga contentos a sus socios separatistas.

Nadie puede entender que Barreda aplauda ni la OCM ni el PEAG. Con la OCM lo que se ha conseguido es una mala prórroga de lo que había, ya que la problemática del sector no se soluciona y no es nada halagüeño lo que puede a pasar en poco tiempo con el viñedo más extenso del mundo. Con el PEAG lo que se pretende es dejar de regar más de la mitad de la superficie de regadío del Alto Guadiana y volver a la agricultura que se practicaba hace más de 50 años.

Es evidente que Barreda, de viña y vino, sabe poco, porque si supiera, no habría permitido llegar a ese acuerdo, o al menos, hubiese peleado de otra manera, si es que ha peleado. También es evidente que Barreda tampoco sabe la importancia que tiene el agua en la agricultura del Alto Guadiana. Si lo supiese jamás habría permitido que se aprobase el PEAG.

Aceptar que Barreda celebre la nueva OCM y el PEAG es peliagudo, como difícil es entender que Barreda y sus altos cargos, con los vientos que soplan en nuestra economía, se hayan subido el sueldo de forma tan chapucera.

Que Barreda haya incrementado su salario en más de cincuenta mil euros anuales es una grosería, pero que apoye la OCM y el PEAG es una insensatez.

Para conocer la realidad, debería Barreda salir al campo y conectar con nuestros agricultores. Se daría cuenta de que los viticultores ven su futuro con incertidumbre y aprendería que, en el Alto Guadiana, no se puede dejar de regar más de la mitad de la superficie que se está regando, porque la actividad agraria es el motor económico de la zona y la agricultura de secano tiene graves problemas de rentabilidad.

Quiere negar la evidencia y hacernos creer que los agricultores aceptan sin fisuras la OCM y el PEAG. Entre los viajes que debería hacer convendría que pasase por Socuéllamos. Allí los agricultores llevan encerrados más de dos meses, porque el PEAG ni resuelve la enorme problemática de las extracciones irregulares, ni permite el intercambio de derechos entre particulares, ni contempla el aporte externo de agua para la recarga de los acuíferos y para usos medioambientales, mientras que potencia la agricultura de secano y pretende que los derechos de riego (vigentes hasta 2035) se conviertan en concesiones administrativas, aumentando así su intervencionismo.

Con sus panfletos de propaganda dirá Barreda, como ya es costumbre, que lamenta la alarma y los temores del PP. Está claro que su política agrícola hace aguas y tiene que usar esos pasquines para tapar las grietas. Ojalá que las aguas que hace su política sirvieran para regar. El problema estaría resuelto.

viernes, 8 de febrero de 2008

La oposición de la oposición

En el tiempo que llevo en las Cortes Regionales tratando a los diputados del PSOE ya tendría que haberme dado cuenta de su estrategia. Es la estrategia de no callarse ni debajo del agua, aunque se les eche encima, una y otra vez, el diluvio universal. Es la estrategia de negar, si es con mentiras mejor, cualquier evidencia y, es la estrategia de hacer responsable de su desgobierno al PP, venga o no venga a cuento.

Me sorprende en el PSOE la capacidad de aglutinar a su gente con una fidelidad a prueba de bombas, aunque no sé si lo hacen por uniformidad de conciencias, por servilismo o porque sigue perviviendo aquella amenaza de exclusión del disidente, que quedó perfectamente reflejada en la famosa frase: “el que se mueva no sale en la foto”.

De una u otra manera sus actuaciones dejan al descubierto su decisión de no permitirnos ni hablar sin que, por principio, se nos contradiga tantas veces cuantas abramos la boca. Así hasta el aburrimiento.

Pues bien, yo les digo que no van a conseguir aburrirnos y que, por más que manipulen, seguiremos exponiendo una y otra vez nuestra postura con la misma terquedad con que ellos intentan ahogar nuestra voz.

Una prueba de esto que vengo diciendo es nuestra postura ante la política hidráulica. Ellos saben muy bien que todo se hubiera arreglado de haberse puesto en marcha el Plan Hidrológico Nacional, pero que, como fue idea nuestra, se negaron a aplicarlo tan pronto como controlaron el poder central. A partir de ahí, todo ha sido un disparate y, en vez de reconocer su torpeza, se empeñan, una y otra vez, en hacernos compartir responsabilidad en soluciones descabelladas, cuando disponen de total capacidad de decisión tanto en Toledo como en Madrid, sin que necesiten para nada nuestro apoyo que, quiero que quede muy claro, sólo lo necesitan para no quedar en ridículo ante los castellano manchegos.

Nosotros podríamos quitarnos de encima el mochuelo con un despectivo “¡allá ellos!”, y si no lo hacemos es por sentido de responsabilidad y, con la misma tenacidad que ellos, seguiremos levantando nuestra voz y denunciando su desgobierno, aunque no sea más que por respeto a los que con sus votos nos han puesto en la oposición. Ni que decir tiene que esta situación durará poco porque los castellano-manchegos se están dando cuenta en qué manos tan torpes están sus intereses. Lo cual, cada día que pasa es más evidente.

Lo voy a decir una vez más. El PSOE no necesita para nada nuestro apoyo, ni aquí ni en Madrid. Lo demás es practicar su típica política engañosa tratando de hacernos responsables de un asunto del que los únicos responsables son ellos. ¡Qué manía tienen en sacar a relucir a Mª Dolores Cospedal, a tiempo y a destiempo, cuando a quien tienen que dirigirse es al Sr. Barreda y al Sr. Zapatero!

Que no mareen más la perdiz. Que deje ya el Sr. Barreda de mandarnos a sus voceros para que, pisándonos los talones, vayan tras de nosotros, obligándoles un día y otro a negar nuestras intervenciones y obligándoles a convertirse en oposición de la oposición.

Parece que con nuestras intervenciones somos nosotros los que les hacemos su agenda de actuaciones. ¿No dicen ustedes que tienen el poder? Pues que lo ejerzan con hechos y no intentando asfixiar nuestra voz con una obcecación fruto de su ignorancia y de sus mentiras, que les lleva a un marcaje cansino que –se lo repito y se lo repetiré cuantas veces hagan falta-, ni nos amedrenta ni nos va a quitar de en medio.

Denle todas las vueltas que quieran al Estatuto, cuya aprobación no han podido gestionar peor, pero les insisto que con quien tienen que ponerse de acuerdo no es con nosotros, sino con sus colegas de la calle Ferraz, y no nos metan ustedes en medio de sus refriegas y disensiones internas. El pueblo castellano manchego sabe que al Sr. Barreda en Ferraz le respetan tanto como nada.

Señores del Gobierno regional: ejerzan el poder con responsabilidad, y no nos pidan un apoyo que no podemos darles sin traicionar los intereses de Castilla-La Mancha.

En el Partido Popular ni tratamos de incordiar, ni de enredar, ni de crispar. Lo que nos ocurre es que nos repugna la estrategia del PSOE.